“Hincar los codos” es necesario para rentabilizar el esfuerzo del estudio. No habrá técnica ni estrategia que “libere” de esa tarea, si se quiere sacar una buena nota o simplemente para aprobar la asignatura. Sin embargo, las técnicas de estudio son importantes para sacar el máximo provecho al tiempo y el esfuerzo.
Hay estudiantes que saben poner en marcha esos “trucos” de manera innata, saben cuándo empezar a estudiar, de qué manera abordar una determinada asignatura, cuando descansar, y si no funciona, tienen planes “b” ya pensados.
Hay otros alumnos que por el contrario, les cuesta más organizarse y necesitan echar muchas horas, pero el rendimiento a veces no es el esperado.
La buena noticia es que a aprender se aprende. El que no se implemente de manera innata (son pocos los alumnos que lo hacen) no quiere decir que se esté condenado a no sacar el máximo partido a las horas dedicadas al estudio.
Para conseguir unos buenos resultados, uno de los puntos importantes es mejorar las técnicas de estudio pero también es preciso trabajar aspectos cognitivos como la atención y la memoria, los hábitos de estudio, la capacidad crítica y por supuesto la autoestima y la inteligencia emocional.
En Psikids hemos desarrollado P.O.D.E.R, un modelo de acción pensado para ayudar a los alumnos a aplicar estrategias que les permiten mejorar en las áreas que intervienen en el estudio. Es un modelo complejo que se lleva a cabo a lo largo de varias sesiones pero os vamos a dar algunas pautas sencillas que podéis empezar a aplicar en casa y que les serán de gran ayuda a vuestros hijos:
Planificar, partiendo de unos objetivos claros. Una de las acciones más importantes en este paso del modelo P.O.D.E.R y que podéis aplicar desde casa, es establecer un calendario de estudio teniendo en cuenta los objetivos y el tiempo que tienen disponible. Anotar en un calendario o agenda las fechas de los exámenes, las tareas y las entregas de los trabajos, les ayudará a establecer unos objetivos.
Organizar: para la consecución de nuestro objetivo.
Dentro de este paso, una de las acciones básicas sería organizar el lugar de estudio, procurar estudiar siempre en el mismo sitio, con una silla y una mesa cómodas, que les permitan tener a mano todo lo que necesitan.
Decidir: basándonos en técnicas de resolución de problemas y de gestión del tiempo, que nos han de llevar a tomar las mejores decisiones.
Este paso es más complejo pero una de las decisiones a aplicar en casa podría ser, por ejemplo, comenzar a estudiar con algo que al alumno le guste, para pasar al poco a alguna asignatura que se les resista más o al contrario dependiendo de lo cansado que este.
Ejecutar: llevar a término lo planificado y organizado trabajando el desarrollo de otras funciones como la memoria de trabajo o la autodirección.
Es la parte crucial, donde debemos poner en marcha las técnicas y habilidades de estudio. Algunas serían; Subrayar la parte más importante del temario o Realizar sus propios apuntes.
Revisar que la tarea se ha realizado de manera correcta y aprender de los errores, si los hubiera, como mecanismo potente de aprendizaje.
Para resumir, el estudio implica estar tiempo delante de un libro, pero para sacar más partido a ese esfuerzo, unas buenas estrategias de estudio ayudan a conseguir el resultado esperado. Si no se desarrollan de manera natural, no hay que preocuparse… ¡A aprender se aprende!