La Educación de mis hijos, Mi Gran Empresa.
Por Belén Moya. Psicóloga en Psikids El Viso.
“Había una vez una muchacha que tenía una vaca lechera muy bella y hermosa. Una mañana iba muy contenta al mercado llevando sobre la cabeza un jarro de leche recién ordeñado…”
Todos conocemos el cuento de la lechera, y sabemos muy bien cómo termina. Quizá alguien podría decir que la lecherita lo perdió todo por culpa de su ambición, pero la realidad es que le hubiera pasado lo mismo si en lugar de ensoñaciones maravillosas hubiera estado pensando en desgracias pasadas, dejándose cegar por ellas. Y es que, en realidad, el quid de la cuestión es que no contó con las piedras del camino.
No hay que vivir en el pasado, ni en el futuro…
Son muchas las ocasiones en las que nuestra mente viaja al futuro, imaginando logros o problemas resueltos, o bien, al pasado, reviviendo bellos recuerdos o llorando tristes amarguras. Y no nos damos cuenta de que la empresa que está en nuestras manos es el presente, el hoy y ahora.
Paso firme para lograr tus objetivos
Como dijo Joseph Joubert “El que tiene imaginación sin instrucción tiene alas sin pies”. La imaginación da alas, pero para alzar el vuelo es necesario tener unos pies para correr por la pista de despegue. Los negocios que imaginó la lecherita no estaban lejos de su alcance, eran factibles, pero se le olvidó que para lograrlo, primero tenía que dar bien el paso que estaba dando en ese momento.
La Educación de mis hijos, “Mi Gran Empresa”
Esto puede ocurrirnos en muchas de las empresas que emprendemos, pero hoy quería invitar a reflexionar sobre esa gran empresa que muchos emprenden. La empresa más importante y con más futuro, una empresa que no se va a pique nunca, que cuanto más inviertes más ganas y que se transmite de generación en generación.
Sí, esa empresa es la educación de los hijos.
Obstáculos, piedras en el camino…
Muchos padres traen a sus hijos a consulta pidiendo consejos y expresan cierto temor a estar actuando de manera inadecuada.
Algunas de las “quejas” que se oyen en consulta es que los niños mienten, desobedecen, pegan o riñen con los hermanos, contestan, tienen alguna rabieta, son inoportunos, son desordenados…
Queridos padres: es muy importante pedir ayuda y consejo para manejar las distintas situaciones que se puedan presentar en la educación de los hijos. Pero es necesario pedir esta ayuda sin olvidar que en el desarrollo de esta empresa hay piedras en el camino y que los hijos no nacen educados.
La receta para que tu empresa triunfe.
Los profesionales podemos ayudaros a aplicar algunas técnicas, a lograr la comprensión de lo que le ocurre a vuestros hijos, a mejorar la comunicación con ellos, algunas nociones del ámbito de las emociones… Pero, la mejor receta para educarlos bien es poder ver y amar el presente de los hijos, sin pretender que sean ya como hemos imaginado que serán en el futuro. Queriéndolos tal y como son será más fácil tener la paciencia suficiente para acompañarlos en el camino de ser mejores, yendo por delante, intentando ser nosotros también mejores cada día.
“La única manera de hacer un trabajo genial es amar lo que haces” (Steve Jobs).