¿Tiene mi hijo el regalo que necesita? Pero si ya tiene de todo, ¿qué le puede hacer ilusión?
Son muchas las preguntas que surgen en la familia con respecto al regalo más idóneo para sus hijos. Existen diferentes fuentes de información que permiten conocer a la familia qué características debe tener un juguete para ser apto para su hijo. Nos informan de la importancia de que el juguete sea acorde al momento evolutivo de niño, pero en menos ocasiones nos preguntamos ¿está eligiendo mi hijo lo quiere o solo sigue una moda?
El juego es un elemento esencial en el desarrollo del niño, tanto desde un punto de vista lúdico como pedagógico, por lo tanto es fundamental guiar el criterio de nuestros hijos en función de su propio desarrollo y preferencias personales. Para ello, es importante tener presente el momento evolutivo del niño y su desarrollo psicológico, teniendo en cuenta las siguientes consideraciones:
- Es fundamental que elija un juego o juguete que le resulte atractivo por sus propios intereses e inquietudes. De no ser así, tenderá a pedir más cantidades de juguetes ya que no logra la satisfacción con lo que tiene.
- En una era tecnológica como la nuestra los juegos de nuestros hijos se encarecen, por lo que es importante orientarles hacia la elección de aquellos que les aporte satisfacción y que cumpla unos objetivos de entretenimiento, lo cual no significa que sea lo más caro ni lo más conocido.
- En el mundo tecnológico es probable que cuando nuestros hijos están disfrutando de “lo último” en un breve intervalo de tiempo esto se quede desfasado tecnológicamente ya que enseguida hay nuevos lanzamientos. Es fundamental trabajar con nuestros hijos la valoración de aquello que tienen, no desechándolo cuando hay algún juguete más actual. Desde el punto de vista psicológico esto favorece que nuestros hijos desarrollen la tolerancia a la frustración y la valoración de lo que tienen.
- Y como última recomendación, regalar más allá de lo material. Favorece el desarrollo psicológico de nuestros hijos, adquiriendo valor aquello que posee un componente afectivo.
Por tanto, es fundamental tener presente que por tener más juguetes, no juegan más si estos no son acordes a sus preferencias. Igualmente aprender a disfrutar aquello que tienen evita caer en la constante necesidad de actualización, especialmente en el área tecnológica, favoreciendo su desarrollo psicológico. Y por último, es fundamental en su desarrollo personal la valoración de otro tipo de regalos, yendo más allá de lo material. Un día en el campo con la familia, una tarde de teatro o una excursión son regalos inigualables.